Un libro siempre es un descubrimiento, una nueva conexión, un encuentro, Quién es Loretta, es un hallazgo, redundante, fantástico, que se atreve a unir la distopía con el autodescubrimiento, que se vuelve introspección, esoterismo y ciencia oculta. Este conjunto de relatos enhebrados por Loretta y sus vidas, recorre géneros también, se vuelve poema, diálogo, escena teatral, es guión y silencio. Todo comienza cuando la protagonista Loretta surge de un pantano, ella se eleva y como lectores nos zambullimos en su mundo interior, en un subconsiente donde los recuerdos de vidas pasadas o futuras no son discriminados y se suceden con la naturalidad fantástica que la autora impone. Loretta se nos presenta desorientada, sin saber sobre su ser ni su historia, en un futura que desconoce, así empezamos a transitar la historia. La acompaña Pránuba, tal vez para no dejarnos solos ante la inmensidad propuesta. Con la compañía se inicia la búsqueda, ¿quién es Loretta?, de dónde viene, ese inconsciente ¿colectivo? que propone la lleva por diversos caminos del saber y como ocurre siempre, el conocimiento no pregunta y en cambio revela, acontece, y avanza sobre Loretta anunciándole lo que la vida le depara como final. Ella no se detiene, y sin tapujos comprende su sitio universal en la cofradía que el destino le propone.
Vamos leyendo y entendiendo que nos cuenta vidas pasadas, inconexos momentos de Loretta que van sucediendo inicialmente desencontrados para hilarse con las páginas y volverse sentido y cauce. Esta nouvelle es iniciática, apretadamente fantástica y llena de sorpresas, pero sin dudas está escrita por una autora que quiero seguir leyendo.
Muy interesante









